31 marzo, 2022
Redacción PH
Redacción PH
Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, acusó a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) de no considerar en sus planeaciones al estado y solo traer obras menores y sin planeación.
Sentenció en su conferencia de prensa matutina, al referirse al convenio de coordinación que firmaron con la Sedatu y Lorena Cuéllar Cisneros, gobernadora de Tlaxcala.
El convenio tiene como finalidad traer proyectos estratégicos que beneficien a los 39 municipios que conforman la zona conurbada de ambos estados.
Es por ello que Barbosa consideró que para que el convenio rinda buenos resultados no solo se requerirá un trabajo coordinado con el estado vecino, sino también la colaboración de la dependencia federal, pues los problemas a resolver son de movilidad, seguridad, infraestructura y hasta de contaminación del aire y el Río Atoyac.
Es por ello que esta vez la Sedatu deberá aportar elementos de estrategia y financieros y no solo considere intervenciones en calles, mercados o zócalos.
“Las obras para generar una planeación no son calles, no son mercados, no son zócalos, a eso me refería ayer. Sedatu no puede venir hacer esto, tienen que ser proyectos estratégicos que permitan generar una planeación de crecimiento, de desarrollo”
No obstante todo lo anterior requiere de la disposición de la Sedatu, la cual considera que no existe a pesar de que el estado tiene mucho interés en trabajar de forma coordinada con la dependencia.
“Hay una condición, si Sedatu federal no aporta elementos de estrategia y elementos financieros no va a funcionar esto (…) Vamos a poner todo nuestro interés, el gobierno del estado de Puebla no ha sido bien tratado por Sedatu federal, pero vamos a tener esa actitud de trabajo, yo no puedo callarme así de sencillo, pero creo que se pueden hacer las cosas y Puebla y su gobierno van a estar muy interesados en que esto funcione”.
Debe recordarse que el malestar del mandatario con la dependencia fue evidente desde el año pasado, cuando acusó a la dependencia de iniciar obras en el Zócalo de Puebla y el mercado Amalucan sin consultar al gobierno estatal.
Incluso las obras que inició la Sedatu fueron clausuradas y con el paso del tiempo los proyectos fueron ajustándose y reduciendo su impacto.