La escritora y periodista Elena Poniatowska acudió “por curiosidad” a la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, desde donde, al ser cuestionada sobre si existe la prensa “fifí”, opinó que no existe.

La escritora de 87 años sorprendió a varios de los presentes quienes no dudaron en cuestionarla sobre porque acudió al lugar.

“No me invitaron; bueno, me invita mi curiosidad”

Por ello descartó levantar la mano para hacer alguna pregunta al presidente, pues, dijo, sólo acudió al salón de Tesorería del Palacio Nacional para ver cómo se realizan las conferencias mañaneras.

Poco después otro reportero le preguntó si estaba de acuerdo con el Ejecutivo y creía que existía a la “prensa fifí”, a lo que ella contestó firme que no.

“La prensa es la más chambeadora”

Su postura contrasta con la del mandatario quien en más de una ocasión ha encasillado a toda la prensa “tradicional” como “conservadora”, chayoteros, fifís e incluso a dado mayor peso a los medios surgido en redes sociales, refiriéndose a los youtubers que comentan notas.

Sobre como arranca la cuarta transformación la literata consideró que va bien, aunque “hay que esperar”.

Al terminar la conferencia matutina, López Obrador pidió a Elena Poniatowska que lo acompañara en el podio. Dijo que iba a darle una noticia pero que después lo comentaba.

“Miren quién nos visita: la mejor escritora del país. Esta mujer que es puro corazón. Además de su inteligencia, está llena de buenos sentimientos. Es la que más defiende al pueblo raso, a los más pobres. Por eso nuestro homenaje, nuestro reconocimiento”.

Elena Poiniatowska ha ganado el Premio Miguel de Cervantes, Premio Rómulo Gallegos, la Beca Guggenheim y es una de las autoras vivas más reconocidas de México. Ha escrito sobre los movimientos sociales de México y ha estado cerca de López Obrador en sus campañas a la Presidencia de México.

En septiembre pasado cuando asistió a la casa de transición de López Obrador, la también periodista aseguró que lo que más esperaba del nuevo gobierno era la honestidad, pues “si los funcionarios son honestos todo va a cambiar”.