Sector productivo también opina sobre el PDI 2021-2025 de la BUAP
Como parte de las actividades de consulta que la BUAP organiza para integrar todas las voces que aporten propuestas para la conformación del Plan de Desarrollo Institucional 2021-2025, representantes del sector productivo participaron en una mesa de trabajo, donde coincidieron en la necesidad de incentivar en los estudiantes las llamadas habilidades blandas o soft skills, una combinación de competencias sociales y de comunicación, aptitudes y capacidad de relacionarse de forma asertiva en distintos contextos.
Celebrada de forma virtual, líderes empresariales como Alejandro Kasuga Sakai, Héctor Alberto Sánchez Morales, Adrián Rossano Camacho, Oliver Sahlmann, Bernardo von Raesfeld y Marco Antonio Prosperi celebraron la iniciativa de la rectora Lilia Cedillo Ramírez de incluir las opiniones del sector productivo para incidir en las directrices que permitirán que los egresados BUAP tengan mejores competencias y herramientas para destacar en el ámbito laboral, así como en emprendimiento y desarrollo tecnológico.
Durante este ejercicio de debate, el maestro Gerardo Sánchez Meneses propuso una pregunta a cada uno de los participantes para detonar la reflexión sobre el perfil del egresado y las competencias que debe tener en un escenario globalizado. En su intervención, el director general del Grupo Volkswagen, Oliver Sahlmann, señaló que la universidad debe cuidar no sólo la calidad académica, sino también las competencias secundarias, impulsando en sus estudiantes un pensamiento crítico, pero también creativo y colaborativo.
Lee: BUAP desarrolla metodologías de control agroecológico para disminuir plagas en maíz
En la misma línea, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Marco Antonio Prosperi, se pronunció por incluir la perspectiva de la educación dual para que su formación se sustente en la práctica real y la aplicación directa de sus conocimientos. Al mismo tiempo, mencionó que la pandemia puso sobre la mesa nuevas formas de comercio, registrándose un crecimiento notable en la modalidad virtual, de ahí la importancia de que los alumnos puedan enfrentar estos retos.
Al igual que los otros ponentes, Adrián Rossano, miembro del Comité Nacional de Innovación de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, hizo hincapié en la necesidad de incentivar tanto las habilidades duras como las blandas, las cuales son preponderantes en el ámbito laboral, porque a través de estas se maneja la comunicación con los otros. “Hay egresados que son muy buenos haciendo una programación, pero no pueden hacer una presentación y vender su producto, no se comunican con su equipo o su gente de trabajo y ahí fallan los procesos y se afectan los objetivos. De ahí la importancia de la educación dual”.
Durante su participación, el ingeniero Héctor Alberto Sánchez Morales, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, insistió en que los egresados también deben tener conocimiento en temas jurídicos y sociales, y no sólo en el ámbito académico. En tanto, Alejandro Kasuga habló de las tendencias para mejorar el talento universitario y destacó los valores y principios como ejes fundamentales para el buen funcionamiento de una empresa e incluso una sociedad. Se pronunció entonces por tres principios básicos: orden, limpieza y proactividad, como habilidades que se tienen que ejercer en los espacios primarios, como el hogar, para poder trasladar esa visión a un ámbito profesional y de esta forma influir en el entorno.
Contribución del modelo UdG
Este ejercicio de reflexión y consulta se suma a otras mesas de trabajo y conferencias celebradas del 15 al 19 de febrero, en las que se incluye la participación destacada de especialistas, como el doctor Carlos Iván Moreno Arellano, coordinador General, Académico y de Innovación de la Universidad de Guadalajara, quien habló este jueves sobre la “Disrupción y continuidad: Consideraciones para el futuro de las universidades”.
Durante su ponencia, la rectora Lilia Cedillo Ramírez agradeció su participación, la cual dijo, servirá para conocer las experiencias de éxito de esta institución, que enriquecen el modelo para la integración del Plan de Desarrollo Institucional 2021-2025 de la BUAP.
En su ponencia, Carlos Iván Moreno Arellano indicó que la pandemia no representó una “revolución tecnológica”, sino pedagógica y organizacional, por lo que hizo evidente la necesidad de una educación más activa, interactiva y cara a cara. Esta situación -dijo- dejó lecciones que deben permanecer, como la empatía, ya que la educación deberá promover no sólo el crecimiento intelectual de los estudiantes, sino también el personal. En la educación en línea o híbrida, las actividades deben diseñarse para mantener la atención del estudiante.
Lee: Acuerda la universidad con SITBUAP y ASPABUAP incremento salarial de 3.5%
Expuso las acciones en materia de política académica por parte de la UdG: programas piloto de transformación pedagógica y digital y para promover el pensamiento crítico, la creatividad y repensar la oferta online en los centros universitarios. También señaló algunos de los desafíos a enfrentar, como ubicar a la educación superior como eje del desarrollo nacional, reducir la dependencia del gobierno federal y del subsidio público, demostrar el valor público y social de la universidad, así como fortalecer la educación con enfoque de “estudios liberales”.
Para consultar el programa de conferencias y mesas de consulta se puede acceder a las redes sociales de la universidad o bien a la página www.pdi.buap.mx, donde también se convoca a toda la comunidad universitaria a participar con sus propuestas.
Autor
Redacción PH