Redacción PH
A pesar de que no se presentó ninguna denuncia o reportes de hospitalizaciones por intoxicación, el gobernador Miguel Barbosa Huerta, ordenó a la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios (DPRIS) que investigue a fondo el caso de intoxicación de jóvenes en una fiesta de Halloween realizada en el salón Country de San Manuel el pasado viernes.
Anunció en su conferencia de prensa matutina, espacio en el que también arremetió contra el ayuntamiento de Puebla por no haber clausurado el recinto e incluso declararse incompetente para hacerlo, cuando al mismo tiempo permiten el funcionamiento de los salones en los que se organizan eventos con venta de alcohol a menores de edad.
Lo anterior en referencia a que el pasado viernes en redes sociales comenzaron a circular videos y fotografías de jóvenes, presuntamente intoxicados por consumir alcohol adulterado en un Halloween organizado en ese salón de fiestas.
Sin embargo, de acuerdo con el secretario de Salud José Antonio Martínez García, hasta este lunes el Centro Regulador de Urgencias Médicas no recibió petición de apoyo ni los hospitales del sector salud para atender a los jóvenes que acudieron a ese evento.
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No obstante, la DPRIS ya supervisó el establecimiento y entregará un reporte sobre el caso.
Ante este panorama, el mandatario insistió en que se investigará el caso al mismo tiempo que pidió a la administración de Eduardo Rivera Pérez no desentenderse del caso, ni excusarse en que no puede intervenir por tratarse de un evento privado.
“Lo que tenemos que investigar es por qué hay salones que se rentan para hacer fiestas donde se cobra por entrar y se vende alcohol, aunque no fuera adulterado. Si fueran unos 15 años es fiesta y se sirve comida y alcohol, y todavía llegan inspectores municipales a verificar de qué se trata y los padrinos pasan a hablar con los inspectores. Acá es una fiesta donde se vendían boletos, era negocio”.
