Redacción

Al cierre del primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que inició el 01 de diciembre de 2018 y terminó el 30 de noviembre de 2019, 17 defensores de los derechos humanos en México fueron asesinados.

Así lo advierte el comité defensor de los Derechos Humanos Cerezo México, que colocó a Chiapas como el estado más peligroso para defensores, con cinco asesinatos.

Le sigue Oaxaca, otro estado con gran presencia de comunidades indígenas y gran riqueza natural, con cuatro asesinatos.

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Guerrero quedó en el tercer puesto con dos asesinatos; Veracruz en cuarto con dos casos, seguido de Morelos, Hidalgo y Estado de México con un caso, respectivamente.

Resalta Veracruz por ser el estado en el que los ataques fueron contra defensores y asesores de personas que buscan a desaparecidos, mientras que en Morelos, Hidalgo y Estado de México se privó de la vida a líderes y defensores de derechos humanos en el país.

De acuerdo con Cerezo todos los casos cumplen con elementos de una ejecución extrajudicial, destacando que fueron realizadas por motivos políticos, es decir, “una forma de castigo por la actividad de defensa que estaban realizando”, siendo los perpetradores “agentes de Estado bajo la modalidad de Comisión o Aquiescencia”.

Además, el Comité Cerezo recalca que las cifras expuestas son sólo de ejecuciones extrajudiciales, dejando fuera todos aquellos homicidios cometidos por particulares.

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Finalmente, el organismo exige al gobierno de López Obrador frenar los ataques y asesinatos de defensores de los Derechos Humanos.