Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, informó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) recibió una demanda por parte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de inacción por parte de los elementos del Ejército en el caso de la explosión del ducto en Tlahuelilpan, Hidalgo.

Ya se recibió una demanda contra la Secretaría de la Defensa por parte de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos acusando al ejército de inacción en el caso Hidalgo, claro que se ve a resolver, pero así están las cosas.

En su rueda de prensa mañanera, el presidente López Obrador dio pormenores de las acciones del plan contra el huachicoleo, además precisó que el número de personas que perdieron la vida a causa de la explosión subió a 89.

Y es que durante el fin de semana han surgido varias voces acusando a los militares de que la tragedia pudo haberse evitado si los efectivos hubieran obligado a la gente a que desalojaran el sitio, pese a que visiblemente eran superados en número.

Por ello, la CNDH inició una queja de oficio para investiga las posibles omisiones en las que pudieron incurrir autoridades federales, locales y municipales para controlar la fuga de combustible en Tlahuelilpan, Hidalgo.

Sin prejuzgar sobre posibles responsabilidades y reconociendo la necesidad y trascendencia de las acciones que lleva a cabo el Gobierno Federal contra la sustracción ilegal de combustible en los ductos de Pemex, este Organismo Nacional, con base en sus atribuciones legales, inició de oficio un expediente de queja para investigar las posibles omisiones que, en su caso, se hubiesen presentado en la actuación de servidores públicos, federales, locales y municipales, para controlar la fuga que presentaba el ducto, así como para prevenir o intentar mitigar los riesgos de afectaciones a la población civil, detalló en un comunicado.

Al respecto el organismo defensor aseguró que desde que tuvieron conocimiento del incidente, personal del organismo acudió a Hidalgo para gestionar las acciones de acompañamiento y asesoría para el traslado de los heridos y deudos de que murieron durante la rapiña.