Para combatir la presencia del crimen organizado en él área limítrofe de Puebla y Veracruz, se establecerá un cerco policíaco en 69 municipios de la región, con la presencia de 400 elementos de la Policía Federal.
Confirmaron los gobernadores de Puebla y Veracruz, Miguel Barbosa Huerta y Cuitláhuac García Jiménez, como parte de una estrategia conjunta para reducir la criminalidad en ambos estados, a la par de un intercambio de información para comenzar a blindar las fronteras de ambas entidades.
Este acuerdo entrará en funciones el próximo 1 de septiembre con recorridos policiales conjuntos para atender la región de Tehuacán y Orizaba.
Sin precisar el número de organizaciones que operan en la zona, el mandatario de Veracruz afirmó que el despliegue se hizo con base en un análisis previo.
“El diagnóstico que tenemos con base al índice delictivo en esta región limítrofe entre Puebla y Veracruz, los delitos de esta franja el robo de vehículo es el principal delito, lesiones dolosas con un 33 por ciento, robo a transporte y el homicidio doloso con 8.6 por ciento; el restante se diluye entre los de más delitos”.
Increíble: En 12 años, en Puebla han detenido a 53 niños sicarios
En tanto, Barbosa Huerta indicó que también tienen identificados 12 generadores de violencia por parte del estado de Puebla, por lo que la prioridad es evitar que los delitos sigan sucediendo y no solamente “fijar como objetivo a un personaje”.
Al mismo tiempo reafirmó su compromiso a combatir “cualquier figura delictiva que se actualice con la conducta de una persona y que infrinja la ley, será perseguida y sancionada”.
En el mismo espacio confirmó la instalación de Cuarteles de Seguridad en más de 30 regiones antes de que termine este año, para comenzar a patrullar todo el Estado, al tiempo que anunció la reactivación de los seis Arcos de Seguridad que hay en el estado.
