Al cumplirse 25 años del asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta, quien fuera candidato del PRI a la presidencia de México y sobre quien se han escrito cientos de líneas sobre las razones y el verdadero responsable de su asesinato, este día se liberó un spot inédito que lanzarían del candidato.

Fue el 23 de marzo de 1994, tras la gira de Lomas Taurinas, en Tijuana, cuando el candidato que había logrado revivir la confianza en el PRI y encabezaba las encuestas fue asesinado de dos disparos por Mario Aburto, señalado hasta el día de hoy como el responsable del magnicidio.

El spot inédito fue publicado por Luévano Sáenz, quien fue secretario de Información y Propaganda del PRI.

En el video afirma que ha llegado el momento de “poner fin a la angustia que a todos nos produce la falta de seguridad y la injusticia. Me comprometo a trabajar con toda mi energía para que nuestras familias cuenten con la seguridad de que la ley estará siempre de su lado”.

La filmación concluye con el lema “Bienestar para tu familia”, con el que manejó su candidatura.

Pese a ser del PRI, su figura contrastaba pues era visto como un “rebelde”, lo cual le valió nuevos adeptos aunque también enemigos al interior de su partido, el más identificado, el entonces todavía presidente Carlos Salinas de Gortari.

La desclasificación

En diciembre pasado con la desclasificación de su expediente de más de 9 mil hojas, videos y fotografías, en el marco del cambio de gobierno, han salido a la luz otros datos sobre aquel día, sin embargo tampoco clarifican lo ocurrido.

Guillermo Hopkins, su coordinador de logística fue quien decidió el itinerario de ese día que inicio en La Paz, Baja California y terminó en Tijuana donde se reunió con vecinos de Lomas Taurinas.

“Nosotros no le tememos a la competencia política. Lo que sí rechazamos es la incompetencia política”, fue una de las últimas frases que el político emitió previo a su asesinato.

“El complot”, un libro escrito por los periodistas Dora Elena Cortés y Manuel Cordero se convirtió en “el libro prohibido”, pues aunque es uno de los tantos que escribe sobre el caso, en él detallan algunos “huecos” de las investigaciones, por lo que su distribución fue prohibida, aunque más tarde el diario El Universal respondió vendiéndolo de manera directa.

Fue declarado clínicamente muerto a las 18:55 horas, en el Hospital General de Tijuana.

Entre los documentos recopilados por la Fiscalía Especial al inicio de las investigaciones está un cuaderno negro con dibujos realizados por Aburto en los meses previos al asesinato. Destaca el “caballero águila”, una imagen de un hombre envuelto con una bandera y la leyenda: “aquellos que estén en contra de las decisiones del pueblo que se consideren traidores a la patria”.

En las declaraciones iniciales el asesino confeso se describe a sí mismo como una persona con ideas pacifistas, que había radicado en distintos estados del país, donde había mantenido contacto con gente de diversos grupos, quienes le conocían como “caballero águila”.

En una de las declaraciones, Aburto dijo que el asesinato del candidato “fue un accidente” pues únicamente buscaba la atención de los medios de comunicación para denunciar las injusticias en el país. En la reconstrucción de los hechos asegura que él sólo efectuó un disparo en contra del candidato y no sabe en qué momento ocurrió el segundo.

El tercer fiscal del caso, Mario Chapa Bezanilla fue removido del caso tras inventar la existencia un cómplice.

La primera hipótesis sobre el asesinato apuntó a que Aburto habría cometido el asesinato en complicidad de cuatro personas, aunque más tarde se cambió a la de un asesino en solitario.

En días recientes el secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, aseguró que no cree en esa tesis.

En una de las declaraciones de Mario Aburto aseguró haber recibido una llamada del expresidente Carlos Salinas para negociar, pero que él habría rechazado. Lo que supuestamente pedía el exmandatario es que declarara que le había pagado un partido político a lo que Aburto se negó.

“Ay la culebra”… la popular canción de Banda Machos, tras quedar asociada directamente con la muerte de candidato, creo un halo de estigma entre los priistas, varios de ellos quienes se niegan a que la canción sea incluida en sus mítines.

Una joven de nombre Graciela, quien entonces tenía 16 años, aseguró ser novia de Aburto y que él le contó que lo llamaban “Caballero Águila”, que sabía del manejo de armas y que había vivido en Chiapas cuando se gestó el Ejército Zapatista de Liberación Nacional. En septiembre de ese año, se retractó de lo dicho.

“Veo un México con hambre y con sed de justicia. Un México de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían de servirla”, se ha convertido en una de sus frases más recordadas.

Este viernes 22 de marzo, los padres de Mario Aburto enviaron al presidente Andrés Manuel López Obrador una carta en la que le solicitan la revisión del caso contra su hijo.

La respuesta del mandatario fue que el caso debe permanecer abierto y que se analizará la carta.

En el mismo espacio el presidente Andrés Manuel López Obrador recordó que conoció al candidato presidencial dos días antes de su muerte, en una cena en la casa de una de sus amigas, Clara Jusidman, activista y defensora de derechos humanos.

Las fotorafías, videos y documentos inéditos que se han publicado son un logro de Mexicanos Contra la Corrupción  logró la desclasificación de 9 mil hojas del expediente que se habían mantenido bajo reserva.

Sin embargo el expediente completo compuesto por 68 mil hojas será abierto hasta 2035.