Aunque los elefantes de Sri Lanka han sido catalogados como en peligro de extinción, en lo que va del año se han contabilizado 238 paquidermos asesinados, reveló el gobierno insular en un informe del Departamento de Vida Silvestre y Conservación.

De acuerdo con su reporte 74 elefantes murieron por razones no identificadas, mientras que 49 elefantes murieron después de recibir un disparo y 36 fueron electrocutados.

Pavithra Wanniarachchi, ministro de Vida Silvestre y Conservación Forestal, precisó que en los últimos cuatro años, desde el 1 enero de 2019 se han contabilizado mil 787 paquidermos exterminados, de estos 439 fueron asesinados durante 2022.

La mayoría de casos se concentra en los distritos de cultivo, donde los elefantes son vistos como plagas que destruyen cultivos como el arroz, el maíz y las hortalizas, alimentos básicos.

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Con estos datos se confirma el aumento en el conflicto entre humanos y elefantes, resultado de que la extensión de los hábitats de los elefantes está disminuyendo debido a la expansión de la construcción comercial y la agricultura.

Sin embargo tampoco es la primera vez que Sri Lanka extermina a sus elefantes, en el siglo XIX durante el periodo colonial británico se cree que había alrededor de 14 mil paquidermos en la isla y miles fueron fusilados a medida que se expandían los asentamientos humanos.

La matanza de los ejemplares se da pese a que la isla utiliza a los paquidermos para promover el turismo de naturaleza en el país.

Sri Lanka también es criticada internacionalmente por la forma en que trata a los elefantes, incluso en las últimas semanas recibieron fuertes críticas después de que Tailanda reclamara por el maltrato que sufre un elefante que le obsequiaron hace dos décadas.

El ejemplar fue rescatado por las autoridades tailandesas y llevado de regreso a Bangkok para que recibiera tratamiento médico.