De libros y más

Y una vez que la tormenta termine no recordarás cómo lo lograste, cómo sobreviviste. Ni siquiera estarás seguro si la tormenta ha terminado realmente. Pero una cosa sí es segura, cuando salgas de esa tormenta no serás la misma persona que entró en ella.

Haruki Murakami, Kafka en la orilla.

En 1936 España se encontraba inmersa en una terrible guerra civil. Los alimentos escaseaban y las condiciones de vida eran terribles para toda la población; los niños eran las principales víctimas de la batalla, algunos habían quedado huérfanos y otros, aun viviendo con sus padres, tenían que encarar el terror de los bombardeos y la más extrema pobreza.

Ante ese panorama, el gobierno, hizo un llamado de auxilio a la comunidad internacional con el lema: “¡Salvad a los niños de España!” Fueron varias las naciones que respondieron de inmediato a esa solicitud de ayuda -entre esas México-, dando lugar a uno de los éxodos más dolorosos que han existido, ya que aproximadamente treinta y cuatro mil niños partieron de su patria hacia diversas regiones de Europa y América Latina, con la esperanza de regresar en unos cuantos meses, sin saber que esa estancia -agravada por la Segunda Guerra Mundial y el triunfo del franquismo en España- en muchos casos sería permanente.

Muchos de los niños exiliados -casi cuatro mil- fueron acogidos por la hoy extinta Unión Soviética, y son conocidos como “Los niños de Rusia”. A pesar del sufrimiento ocasionado por la separación, en un principio el gobierno ruso les proporcionó buenas condiciones de vida, pero en muy poco tiempo, tuvieron que enfrentar la guerra, el hambre y el frío, además de sufrir las consecuencias de decisiones políticas que, más que beneficiarlos y buscar el posible regreso a su país, los utilizaron para promover las supuestas virtudes del régimen estatal.

Este tremendo momento histórico da pie a El baile de las marionetas, una muy buena novela escrita por la cordobesa Mercedes Guerrero. En esta obra, la autora entrelaza dos épocas, -la del exilio y el presente- teniendo como hilo conductor las vivencias infantiles en Rusia durante la guerra, creando una atmósfera de misterio alrededor de una pequeña joya que es encontrada por causalidad y que remite a un relato familiar que tuvo lugar durante el exilio ruso.

“Aquel sábado lucía un sol espléndido en Bilbao, a pesar de las nubes negras del horizonte que los cañonazos lanzados hacia la costa por los barcos del bando fascista desde mar adentro dejaban como rastro. En el puerto de Santurce se había instalado una gran carpa para organizar el embarque. A cada niño se le ofrecía un cartón de color azul o rosa que debían llevar prendido en su ropa, en el que estaba escrita su identificación y el lugar de destino. Al caer la tarde, el capitán dio la orden de bajar la pasarela del barco y comenzaron a embarcar los pequeños de entre cuatro y catorce años. Algunos iban sonrientes, con el puño en alto o sosteniendo sobre los hombros a sus hermanos más pequeños. Otros lloraban, sujetando con una mano su escuálido equipaje y agitando la otra para despedirse de los padres, que, apretujados en el muelle, contenían con angustia las ganas de llorar y gritar, con sentimientos encontrados de alivio por librarlos de los bombardeos y del hambre, y también de incertidumbre por la suerte que iban a correr sus hijos, quienes partían, indefensos, hacia una aventura desconocida”.

 

El baile de las marionetas, es una muy recomendable y entretenida historia de sobrevivencia, solidaridad y amor; en la que guerra solo sirve de escenario para evidenciar el alto precio que pagan las víctimas de cualquier conflicto bélico, y que las decisiones que se toman en los grandes escritorios de los gobernantes poco tienen que ver con el trasfondo político que esconden, a pesar de estar adornadas con cánticos y coloridos desfiles; así que, si quiere pasar un buen rato adentrándose en esta época de la historia española y disfrutando de una narrativa ligera, este libro es el ideal.

“La ciudad de Leningrado se había echado a la calle para recibir a los «niños del heroico pueblo español» rescatados de los horrores de la guerra civil que se estaba desarrollando en España. El cortejo estuvo rodeado de flores y bandas de música. Las banderas rojas de la Unión Soviética y las tricolores de la República Española ondeaban al paso de los pequeños, que con ingenua alegría desfilaban con el puño en alto ataviados con el gorro de milicianos y cantando el Himno de Riego o La Internacional.

Adriana Hernández Morales

 

Título: El baile de las marionetas

Autora: Mercedes Guerrero.

Editorial: Debolsillo – Penguin Random House Grupo Editorial

(También disponible en formato electrónico).

Mi correo: adrianahernandez1924@gmail.com


Adriana Hernández, es miembro del Club Nacional de Lectura Las Aureolas, club fundado por Alejandro Aura en 1995. Es además una mujer comprometida con las causas sociales, abogada de profesión y lectora por vocación.