Además de la exigencia a las autoridades de mayor seguridad y el respeto a los contratos colectivos, durante la marcha del 1 de mayo los trabajadores poblanos dejaron en claro su rechazo a la reforma laboral recién aprobada.
En este punto coincidieron sus líderes durante la movilización de este día, en la cual participaron más de 20 mil trabajadores pertenecientes a varios sindicatos y organizaciones adheridos a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT).
De acuerdo con Rey David García Avendaño, líder del Sindicato Independiente de la Industria Automotriz Volkswagen (Sitiavw), la nueva Reforma Laboral debería representar una oportunidad para sentar las bases de una nueva relación entre empresas, trabajadores y autoridades.
No obstante, previó que la administración de Andrés Manuel López Obrador sólo la vea como “un trámite” para lograr la firma del Tratado de Libre comercio entre México, Estados Unidos de Norteamérica y Canadá (T-MEC).
Mientras Leobardo Soto Martínez, en otro espacio, llamó a las autoridades a “revertir” los errores de la reforma laboral.
“Le decimos al gobierno federal que no se equivoque, que esta reforma laboral estamos a tiempo de corregirla, que necesitamos llevar la voz de los trabajadores a la Cámara de Diputados”.
Y es que, señaló, la reforma debe modificarse considerando las inquietudes de la clase trabajadora relacionadas con impuestos a prestaciones, vivienda y reparto de utilidades.
Ambos coincidieron en que la mayor demanda se centra es frenar la legalización del outsourcing, el cual representa el mayor retroceso a sus derechos sindicales.
En las marchas participaron sindicalizados de la empresa Seglo, Audi, Telmex, CNTE, BUAP, Issstep, Suntuap, Inaoe, además de los burócratas del estado de los tres poderes e incluso de la 28 de Octubre.
Quien más destacó fue el contingente de los miembros del Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi (Sitaudi), quienes desfilaron por primera vez.
Finalmente, la demanda de todos los líderes sindicales y trabajadores a estar unidos para defender sus derechos con fuerza e inteligencia y solidaridad para afrontar los cambios que impone la reforma laboral.
