Redacción PH

Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, aseguró que el hallazgo del bebé Tadeo en un contenedor de basura del Penal de San Miguel, no respondió a algún ilícito, sino que solo fue usado para intentar desestabilizar el penal, pues dentro se vive una lucha por el control del lugar.

Reveló en su conferencia de prensa matutina, espacio en el que también descartó las teorías que apuntaban a que fue utilizado para introducir drogas o para prácticas esotéricas.

En ese sentido dijo que el único interés de los cinco involucrados, de los cuales dos mujeres ya están detenidas por introducir los restos exhumados del bebé, dos más son reos y la quinta persona es un custodio que será detenido en las próximas horas, era desestabilizar la vida interna del penal.

“Lo fundamental ya está, la razón de esto. Eso es un asunto que a todos nos mueve, ¿Cuáles fueron las motivaciones de estos presuntos delincuentes para haber introducido el cadáver del niño Tadeo? y no hay otra más que esta disputa por el control del reclusorio y la desestabilización del mismo”.

De acuerdo con el mandatario se trató de un “asunto de presión y lucha por el control”, pues tras la detención de 21 custodios y funcionarios del penal, así como del cambio de directivos, los internos quisieron imponer condiciones en el manejo del penal, por lo que varios fueron trasladados a penales federales.

Agregó que la Fiscalía General del Estado (FGE) ya cuenta con todas las pruebas todas ellas con una corroboración científica, con pruebas periciales y videos que dan cuenta de una secuencia de hechos por parte de las personas involucradas.

Finamente, descartó que en Puebla exista impunidad, al mismo tiempo que reconoció el trabajo de la FGE en la investigación que culminó en la detención de los cinco involucrados.