Gabriela Xelano
El Consejo Universitario de la BUAP aprobó que sean dos consultoras las que se encarguen de auditar los recurso que recibe la institución, después que de que la Auditoría Superior del Estado (ASE) no aprobara a Fates Consulting por un supuesto conflicto de interés.
En sesión extraordinaria virtual el máximo organismo universitario anunció que el despacho contable Nieto Bravo auditará los recursos de procedencia estatal para la ASE, firma que fue elegida -se precisó en la reunión- por adjudicación directa debido a la premura y falta de opciones que dio la dependencia comandada por Francisco Romero Serrano.
Mientras que Fates Consulting SC hará lo mismo, aunque con los recursos de procedencia federal ante la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
El que cuente con dos firmas, explico Alfonso Esparza Ortíz, rector de la BUAP responde a que Fates Consulting SC inició un proceso legal contra la ASE por los requisitos que le impuso para revisar los recursos que entrega el estado.
Ello impedirá a la consultora llevar las cuentas estatales, no obstante Fates Consulting SC seguirá como despacho externo.
Se designó a Fates Consulting SC atendiendo lo que marca el estatuto de la máxima casa de estudios. El auditor externo se encargará de revisar la totalidad de recursos que maneja la institución para efecto de rendir un informe al Consejo Universitario. Independientemente, hay una información que tiene que presentarte a la Auditoria Superior del Estado, para ello, son únicamente, los auditores los que designó la Auditoria Superior del Estado. Antes, el mismo despacho hacía todo, pero ahora, la ASE publicó en mayo pasado una lista de auditores. En virtud de lo que ya todo conocemos y de cómo se han manejado las cosas y cómo se han distorsionado las cosas por la ASE, la Contraloría de la BUAP es la que ha llevado el tema.
También se mencionó que el despacho Nieto Bravo fue uno de los pocos que consideró la propuesta pues el resto de empresas auditoras rechazó colaborar con la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), por miedo a represalias.
Cabe recordar que para este 2020 a la máxima casa de estudios se le asignó un presupuesto de 6 mil 801 millones 394 mil 875 pesos, recursos que el 64 por ciento proviene de aportaciones federales y 32 por ciento es de origen estatal más un 8 por ciento que obtienen de recursos propios.
Adiós Lobos
En la misma sesión y también por unanimidad, el Consejo Universitario canceló la autorización del uso de la marca Lobos BUAP y del Estadio Universitario de Ciudad Universitaria al empresario Juan Guillermo Aguilar Macías.
La decisión se tomó después de que el empresario incumplió con la entrega de diferentes documentos legales para autorizar el uso del nombre Lobos BUAP y del estadio universitario para un equipo que militaría en la Liga de Balompié Mexicano (LBM).
Cabe recordar que en la sesión del pasado 17 de junio se había avalado entregar en comodato el estadio y usar el nombre de nombre de Lobos BUAP, sin embargo ante los incumplimientos se avaló cancelar la autorización de firma del contrato de comodato del Estadio Universitario y licencia de uso de la marca “Lobos BUAP”.
