José Juan Espinosa Torres, presidente de la Comisión Inspectora del Congreso de Puebla, aseveró que a la LIX Legislatura le detectaron un desfalco de 70 millones de pesos, cifra que repartieron entre un grupo selecto de diputados, en vísperas del término de su periodo legislativo.

Denunció el diputado del PT, al advertir que además la legislatura anterior, que tuvo una mayoría panista, también desapareció mobiliario de oficina y equipo de cómputo.

De acuerdo con las auditorías externas realizadas por la nueva legislatura, tras el proceso de entrega recepción, tampoco se descarta que se abra investigaciones contra los involucrados y se comience a llamar a comparecer a los funcionarios para que expliquen los faltantes que se reportaron tanto en recursos económicos y materiales.

Tales observaciones ya fueron reportadas con Gabriel Biestro Medinilla, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, para que se inicien con las diligencias correspondientes.

También advirtió que se detectó un pago “excesivo” por el proceso de entrega recepción de hasta cinco veces más alto de lo previsto por parte de la nueva legislatura.

Por ello, Espinosa Torres agregó que en los próximos días “destaparan” el saqueo con la presentación de un documento que incluirá los nombres de los legisladores beneficiados con la entrega de cheques bajo el concepto de “apoyos legislativos”.

Sigue revisión a Moreno Valle

En otro tenor, mencionó que será hasta dentro de tes o cuato semanas cuando concluya el análisis de la cuenta pública del exgobernador Rafael Moreno Valle, la cual exigieron reabrir pese a que ya había sido aprobada por la Auditoria Superior del Estado.

Finalmente insistió que las cuentas públicas no se usarán como “garrote político” ni con fines electorales, por lo que no descartó que se podría suspender la revisión de estados financieros durante los cuatro o cinco meses que durará el proceso electoral.