Gabriela Xelano
Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, aseguró que aunque fue la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado de Puebla, la que nombró el nuevo patronato este no tienen el control de la Udlap, por lo que si la universidad sigue ‘cerrada’ es por culpa de los Jenkins.
Aseguró en su habitual conferencia de prensa al ser cuestionado sobre la protesta que este jueves llegará a Casa Aguayo por parte de la comunidad Udlap, que exige el regreso de las instalaciones para que retomen clases presenciales.
Sin embargo, el mandatario rechazó que su gobierno o él tengan algo que ver con que la Universidad de las Américas Puebla (Udlap) permanezca cerrada, responsabilizando de esto a Cecilia Anaya Berrios, rectora interina y el patronato ‘original’ de la Fundación Jenkins.
“¿Quién tienes control de la Universidad? Lo voy a decir como opinión, no para generar un debate. La rectora que nombró la Fundación de los señores Jenkins, que es la heredera de lo que hizo el exrector Luis Ernesto Derbez. Ellos lo tienen. ¿Por qué dicen que está tomada la Universidad?”
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Fue así como recalcó que no dependen de él o su administración la reapertura de la universidad privada.
“Nadie la tiene tomada, el gobierno no la tiene tomada, quien ha decidido que no se regrese a clases presenciales son ellos”.
También dijo que el patronato original mantienen el control financiero y académico de la institución, por lo que invitó a la comunidad Udlap a informarse, pues si no han regresado a las actividades presenciales es por decisión de la rectora interina y el patronato.
“Si no están en clases es por decisión de ellos, que quede claro a la comunidad universitaria, ellos son los que han decidido, no hay ninguna decisión de ninguna autoridad que impida el funcionamiento de la Universidad de las Américas, que digan cuál es la decisión para impedir. De una vigilancia interna ni enterado estoy, y si la hubiere, no impide el funcionamiento”.
Sobre el proceso judicial por el que inició la ‘toma’ de la Udlap el mandatario informó que se trata de un ‘litigio complicado’ por el que las investigaciones sobre el desfalco a la fundación Jenkins siguen su curso y se han judicializado, también hay juicios civiles, amparos y hasta ordenes de aprehensión.
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Finalmente, consideró que la consigna de “devuélvanos a la Udlap” responde solo a una muy buena y profesional estrategia de comunicación de la Fundación Jenkins para culpar al gobierno estatal de la presunta toma.
“ Eso de devuélvanos a la UDLAP, ¿en qué se basan?, ¿por qué dicen que está tomada la universidad?, si manejan las cuentas bancarias, lo administrativo y académico. Sino están en clases es por decisión de ellos. No hay decisión de alguna autoridad que impida el funcionamiento”.
