Redacción

Andrés Manuel López Obrador lamentó que en la toma de instalaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se “ultrajara” un retrato de Francisco I. Madero.

“Yo respeto todas las manifestaciones, pero no estoy de acuerdo con la violencia, el vandalismo, no estoy de acuerdo con lo que hicieron con la pintura de Francisco I. Madero”, manifestó el presidente en conferencia de prensa desde Palacio Nacional.

Incluso, para dejar más clara su inconformidad por la demanda de justicia, el mandatario tildó de “conservadoras” a las protestantes.

Quienes afectaron la imagen de Francisco I Madero son conservadoras o no progresistas, aunque entiendo su dolor.

Aunque dijo “entender su dolor”, consideró que es una gran ofensa las pintas que se hicieron del cuadro, algo que “no le gustó”.

Dan a qué pensar esas actitudes, ofrezco disculpas por lo que estoy diciendo, claro que no me gustó, cómo me va a gustar ver a Madero ultrajado. Nadie debe de ser ofendido así, vilipendiado, menos un luchador por la democracia como Madero.

Desde ayer, un grupo de feministas mantiene tomadas las instalaciones de la CNDH, como medida de presión para que se atiendan los casos de familiares de víctimas de violencia.

La sede de la CNDH fue tomada el jueves por los familiares de víctimas, pero el viernes una veintena de feministas llegaron al lugar para hacer suyas las demandas y se apostaron en el lugar en el que dijeron se mantendrán por tiempo indefinido.

Este sábado tanto las feministas como las madres de víctimas que ocuparon las instalaciones arrojaron documentos y mobiliario a la calle que después quemaron, además de exhibir comida que encontraron en el edificio, principalmente cortes de carne, algo que dijeron que es contradictorio ya que la CNDH les ha dicho que no cuenta con recursos para apoyarlas.

Con información de EFE