Que alguien le diga a nuestro prejidente que reducir a toda la prensa a fifí, al mismo tiempo que niega que el calificativo representa algún tipo de agresión contra los reporteros, no aporta nada a la ya polarizada opinión que en redes sociales se está oficializando sobre los medios.

Ya van dos días seguidos en los que el presidente no entiende que no entiende.

Y es que nuestro cabecita de algodón prefiere hacer “oídos sordos” ante cualquier pregunta que le incomoda, arguyendo que proviene de un “fifí”, de la “prensa vendida”, de la mafía del poder a la que nunca cuestionaron.

Sin embargo, en la realidad el tres veces candidato a la presidencial, está limitando el derecho de ejercer el periodismo libre.

Fifís, fantoches, hipócritas, doble cara, aplaudidores y otras más, fueron los adjetivos que hoy repartió cuanto otro reportero pidió, otra vez, dejar de confrontar.

Andrés Manuel, entiende que no entiendes.