Redacción

Las condonaciones de impuestos, créditos y apoyos a microempresarios y ciudadanos pasarán factura a las finanzas de Puebla, las que en el peor de los escenarios, al finalizar el 2020 representarán una caída en los ingresos del gobierno de hasta 9 mil millones de pesos, estimó el gobernador Miguel Barbosa Huerta.

En su conferencia de prensa matutina, a más de 70 días del inicio de la jornada nacional de Sana Distancia, el mandatario previó que la crisis económica generada por la pandemia del COVID-19, -en el mejor de los escenarios- sea de 4 mil millones de pesos, en el de afectación media será de 6 mil millones, y en el peor alcanzaría los 9 mil millones.

De llegar al peor escenario, el estado tendría una reducción en sus ingresos del 9.19 por ciento, por lo que podría hacerse uso de una serie de fondos para compensarlo, lo que a su vez implicaría perder ese fondo para 2021.

En este año, qué va a pasar, pues que toda la recaudación federal y estatal se cayó, no se va a caer, se cayó, si al final del año el impacto de esta crisis es menor, será de 4 mil millones y si es mayor de 9 mil millones.

Pese a ello descartó recurrir a endeudarse, pues el estado cuenta con finanzas sanas que le permiten seguir haciendo frente a la contingencia y a su compromiso de dar una mejora salarial del 20 por ciento a más de 7 mil elementos de la Policía Estatal.

Finamente, recordó que el presupuesto del Estado se integra por 90 mil millones de pesos de prerrogativas de la Federación y 8 mil millones de pesos de ingresos propios, siendo los montos propios los que se verán disminuidos.